¿Cuándo medir con encuestas?

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La medición de impacto es un desafío que requiere que se tengan claros varios puntos como: ¿qué quieres medir?, ¿con qué datos cuentas?, ¿dónde encuentras esos datos y cuándo puedes / debes recolectarlos? Y esas respuestas te llevarán a saber si necesitas medir con encuestas.
 
La encuesta es uno de los instrumentos predilectos en el levantamiento de datos y es considerada una fuente primaria de recolección de datos.
 
No obstante hay quienes aun tienen reservas al momento de decidir si usarlas o no, pero la verdad es que la encuesta es una herramienta válida si se diseña y aplica de manera correcta.
 
Básicamente hay dos tipos de encuesta:
  • La autoadministrada: Es aquella que se responde sin un intermediario o encuestador, ya sea en papel o en un dispositivo electrónico.
  • La administrada: Se hace mediante la figura del encuestador, quien hará las preguntas y te atenderá en tus dudas.
Seleccionar uno u otro tipo, va a depender del tipo de estudio que se realizará, sus objetivos e indicadores. Pero para tomar esa decisión también se considera el presupuesto de la investigación y el tiempo con el que se cuenta.
 

¿Cómo deben ser las preguntas en una encuesta?

 
Como sabrás, una pregunta mal formulada produce sesgo en el estudio, por lo cual conviene asegurarse de plantear las interrogantes de forma correcta. Hay 5 condiciones principales con las cuales debe cumplir una pregunta:
  1. Tener sentido positivo. Las preguntas formuladas en forma negativa causan confusión para el que responde.
  2. Evitar el anclaje, efecto marco o caer en la deseabilidad social, que se traduce en sugestionar de alguna manera la respuesta.
  3. Cuidar las categorías de respuesta que tiene la pregunta, deben estar las posibles respuesta y además no sobreponer las categorías.
  4. Tener precisión: significa que tiene que estar formulada con objetividad y bien explicada para tener respuestas sin sesgo.
  5. Evitar el efecto telescopio, siendo bien preciso con las fechas o etapas de tiempo de las cuales se desea saber algo.
Aunque no hay nada definitivo en cuanto al número de preguntas, lo ideal es que no tenga más de 40 preguntas, porque de lo contrario, se corre el riesgo de que el encuestado se canse y abandone la encuesta.
 
Por otra parte, debes tener en cuenta que la duración de la encuesta también depende del canal que planees usar para aplicarla; si es telefónica debe ser mucho más breve que si es online. Sin embargo, encontrarás que mucha literatura indica que la encuesta administrada, ofrece la ventaja de dar más tiempo para contestar.
 

¿Cuándo debemos medir con encuestas?

 
Las encuestas son totalmente necesarias cuando:
  1. Necesitas obtener los datos de una fuente primaria y realizar un análisis estadístico basado en la evidencia.
  2. Debes obtener una muestra representativa de una gran población.
  3. Necesitas un método costo efectivo.
  4. Lo que desees saber, se puede resumir en pocos ítems.
  5. Deseas aplicar una técnica de levantamiento totalmente anónima.
  6. Requiere un amplio alcance y cuentas con poco tiempo para lograrlo.
  7. El enfoque del levantamiento de datos está más orientado a lo objetivo.
  8. Estás de acuerdo en probar el instrumento para detectar los posibles sesgos de manera oportuna.
  9. Necesitas información contextual de la muestra a la cual va dirigida el programa (datos de gustos, tendencias, demográficos, económicos, entre otros).
 

¿Qué debo tomar en cuenta al aplicar encuestas?

Si cumples con uno o varios puntos de la lista anterior, significa que debes aplicar encuestas. En ese caso considera los siguientes aspectos:
 
  • Momento para aplicar la encuesta

El momento ideal para aplicarlas depende de lo que se quiera investigar.
Por ejemplo, si quieres hacer una investigación sobre cómo los niños perciben ciertas golosinas y no cuentas con el apoyo de instituciones educativas para el levantamiento de información, deberías aplicar la encuesta en parques y durante fines de semana que es cuando los padres suelen llevar más a sus niños a pasear y están relajados como para probar golosinas y responder la encuesta.
 
Otro punto a considerar es que mover a un equipo de encuestadores de campo es costoso, así que debemos decidir muy bien cuándo, cómo y dónde.
 
  • Preparación del encuestador

 
Esto nos lleva a considerar el punto del rol del encuestador, quien además de estar debidamente entrenado para la tarea, debería tener ciertas cualidades como responsabilidad y ética.
Un encuestador debe asumir su rol con todo el conocimiento teórico y práctico necesario para salir a campo.
 
Por ejemplo, debe conocer todo el proyecto para poder guiar a su encuestado en caso de dudas, debe tener excelente comunicación y hacerse sentir confiable para el encuestado.Existen técnicas como el rol play para facilitarle la adquisición de estas destrezas.
 
Por otra parte, debería ser precavido para salir a campo con todo lo que necesita, desde baterías cargadas y todos sus dispositivos bien probados.
 
  • Confiabilidad del instrumento

En el caso de las encuestas es necesario considerar qué tan confiable es el instrumento que se está usando. Esto se puede determinar gracias a la exactitud y precisión del indicador a medir; esto es: un indicador es exacto si no tiene desviaciones sistemáticas del valor verdadero y es preciso, si en mediciones repetidas del mismo objeto siempre generan el mismo valor.
Por este motivo, se recomienda acudir a fuentes confiables para elaborar estas encuestas y garantizar así su confiabilidad. Existen herramientas que te ayudan a automatizar el proceso de elaboración de las encuestas con la garantía de confiabilidad que necesitas, como es el caso del software de Cuantix.
 
En resumen, te podría decir que las encuestas son un instrumento muy confiable y sigue siendo utilizado en los procesos de medición de impacto por su comprobada costo efectividad.